Jueces del Tribunal Colegiado.
Por
Antonio María Jiménez
Periodista
y miembro del CDP y el SNTP
Los magistrados jueces
que componen el Segundo Tribunal Colegiado, licenciados María de los Ángeles
Concepción, Arelis Camacho y Víctor Alfonso Inoa Gómez, evacuaron una sentencia
de 30 años de cárcel para el joven Marlon Martínez, como responsable del
asesinato de la menor embarazada Emely Peguero.
Esta condena es la que
esperaba la familia Peguero, sus abogados y la gran mayoría de la sociedad
dominicana, la que sí no esperaba, fue la emitida contra la señora Marlyn
Martínez, de apenas 5 años de cárcel, presuntamente “justificada” con lo que
establece el Código Procesal Penal Dominicano.
Las evidencias presentada por
el Ministerio Público, que manifestaban “complicidad” de la señora Martínez en
tan horroroso y espeluznante crimen, fueron enviadas al zafacón del Palacio de
Justicia, como la orden expresa dada a su hijo para que resolviera en su
condición de hombre el caso del embarazo de la menor.
Ceder las llaves de su
apartamento para que allí se cometiera el crimen, la sustracción del disco duro
de la cámara de vigilancia, el pago de 100 mil pesos a un particular para que
desapareciera el cadáver y de manera burlona caer en el perjurio ante la
familia Peguero y los cuerpos investigativos de la Policía.
En medio de las violentas
protestas que se originaron ayer, con un saldo trágico de heridos y suspensión
de todas las actividades productivas, el abogado de la familia Peguero,
licenciado José Hoepelman y el Procurador General de la República, doctor Jean
Alain Rodríguez, anunciaron por separado, que tan pronto sea formalizada la
sentencia, ésta será apelada ante la Corte Penal.
Si apegado al Código Procesal
Penal se sigue buscando subterfugio o argumentos jurídicos para asegurar impunidad
a asesinos vestidos de políticos, nunca tendremos el país que soñó y construyó
el patricio Juan Pablo Duarte.
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