Maquiavelo
adquirió fama con su papel en la política florentina que fue clave en el
caos en los quehaceres en la Italia renacentista.
Las
cuestiones se acelerando con dimensiones incalculables cuando en aquella época Santiago
y Juan querían ser elegidos para convertirse en los más cercanos a Jesús, y al
darse cuenta del pugilato prevaleciente, los demás discípulos reaccionan
molestos, preguntándose._Y por qué ellos van a ser los preferidos?.
Enterado
Jesús de lo que estaba sucediendo y que había rechazado el poder en las
tentaciones del desierto, les advirtió a Santiago y a Juan: “Ojo con la
tentación del poder”, a la vez que les indicaba respecto al “buen uso del poder” de que la clase es servir,
no servirse.
Indicaba
en aquella época Jesús a Santiago y a Juan que él no vino a la Tierra a que lo
sirvieran, sino que a cumplir la misión de a “servir”.
Los discípulos
al ver la reacción de Jesús entendieron que los discípulos deben tener la
capacidad de influir, de figurar, y que solo es válida cuando tiene el sentido
del servicio a favor de los demás y que lo demás son privilegios desarrollados
por egoístas.
Este miércoles, el Subdirector
de Información y Prensa de la Presidencia, con sede en Región Norte en la
ciudad Santiago de los Caballeros, Ingeniero Agrónomo, Doctor en Fármaco
Bioquímico; Abogado y Político, Lucildo Gómez Jiménez ha publicado en su cuenta
de Twirer un texto mediante expresas; “Las cosas que cambian y nos distinguen”:
Cosas del pasado: “EL PODER ES PARA USARLO”.
Gómez Jiménez colgó en el mismo
texto: El presidente Luis ABINADER
sustenta su gobierno en el principio de que “EL PODER ES PARA SERVIR”,
desterrando el concepto milenario de que el poder es para usarlo. #EstamosCambiando.
Así concluyó el funcionario palaciego con sede en la
Zona Norte sus inquietudes.
Vicepresidenta de la República y la actitud de la gobernadora de Montecristi.
Mientras la Vicepresidenta de la República, Raquel Peña quien ayer martes estuvo en Santiago en los actos del 177 aniversario de la Batalla del 30 de Marzo del año 1844 al hablar con los periodistas le tiró la “toalla” a la gobernadora de Montecristi, Nelsy Milagros Cruz Martínez a la que llamó que es una muchacha buena, que está haciendo "un buen trabajo por su pueblo".
La segunda mandataria llegó
más lejos, a la vez que expresó: “Entonces vamos a decir que tenemos que darle una
oportunidad, porque su intención es otra”.
Cruz Martínez salió a la
palestra pública luego de salir a defender el loable trabajo de miembros,
seguidores y dirigentes del Partido Revolucionario Moderno de que se estaban “tragando
un cable” a pesar de estar en el poder, mientras los opositores del pasado gobierno
se mantienen en los cargos.
La madre de la funcionaria,
Doña Nelsy Cruz, en tono molesta enfrentó por las redes sociales a la
emblemática perremeista y directora del Departamento de Ética del Gobierno de
Luis Abinader, la Doctora Milagros Ortiz Bosch a quien llamó “vieja chancluda”
causando una retahíla de crítica.
Sin embargo, contrario hizo
su hija y gobernadora de Montecristi que salió a defender lo que antes había
expresado y pidió excusa por haber emitido a la publicidad alegados abruptos.
Ante estos embrollos,
políticos estarían emulando a Maquiavelo con sus ocurrencias políticas
partidarias respecto al sentido del poder.
A Maquiavelo, aprovechando sus
conocimientos de los clásicos, retórica, talante negociador, ingenio y los
enquistaron en los quehaceres políticos, viajando de aquí para allá, hacia acá,
ganó prestigio, confianza de sus subordinados, pero olvidó a quién le debía su
cargo, ya que nunca agradecía los favores que los nobles le habían otorgado y éstos
no se lo perdonaron esa ingratitud.
La suerte cambió para
Maquiavelo y el gran pensador llegó el tiempo de su caída en que no se levantó
jamás, derrota que estuvo encabezada por poderoso cardenal romano Juan de
Medici quien restauró a su familia en el poder de manera definitiva, a la que
instaló en la ciudad de Florencia.
La desgracia contra Maquiavelo
fue de tal magnitud, que lo quitaron de todos sus cargos, lo acusaron de
traición, fue encarcelado, condenado a muerte y milagrosamente logró que lo
indultaran, teniendo que instalarse en el campo con su familia a la espera de
que las cosas mejorasen.
Prácticamente desterrado,
Maquiavelo escribió aquella su obra cumbre que lo reactivó la cual tituló “El
príncipe”, en la que vertió conocimientos sobre política, envió copias a su antigua ciudad de Medici en
busca de que sus amistades lo ayudaran a comprar la obra, sin embargo, ni su
propia familia quiso ayudarlo ni siquiera quisieron saber jamás nada de él
hasta que murió.
El comportamiento de los
familiares contra la “estrella de Maquiavelo” fue porque durante sus años de
gloria había cambiado demasiado que ni siquiera los buscaba y cuando cayó en
mala los buscaba, lo que impidió recuperar su prestigio.
Muchos políticos deberían
tener presente que “La naturaleza de los pueblos es muy poco constante, ya que
en ocasiones resulta fácil convencer a las gentes de una cosa, pero es difícil
mantenerlos convencidos para siempre”.
Además, sería bueno recordar
algunas de las frases de Maquiavelo cuando estaban tirado abandonado en el
monte de que a los hombres se les ha de mimar o aplastar, porque se vengan de
las ofensas ligeras, en virtud que de las graves no pueden; las injusticias se
deben hacer cuando hagan menos daño.
Recordaba que los favores
deben apreciarse mejor; un príncipe que no se preocupe por las calamidades de
los demás y que le pueden acaecer en el porvenir, jamás podrá ser apreciado por
sus soldados ni tampoco fiarse de ellos.
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