Niña es hallada sin vida y su hermano de 13 años es el principal sospechoso
La tragedia sucedió en el sector Villa Cerro, el hallazgo sin vida de una niña de 10 años, de iniciales Y. G. M., en la casa de sus padres ubicada en la calle José Martín.
La menor fue hallada en el hogar de su familia, ahora llena de profunda consternación.
Médicos, autoridades policiales y judiciales determinan que la causa de la muerte estaría vinculada a un compromiso respiratorio por constricción del cuello.
Esto llevó a las autoridades a iniciar una investigación exhaustiva y el principal sospecho del trágico episodio es su hermano de 15 años, de iniciales L. V. G.
El jovencito está detenido en proceso de investigación mientras se determina su responsabilidad en los hechos.
El abuelo de los menores, cuyo nombre se reservó, comentó a las autoridades que el adolescente presenta condiciones de salud mental, recibe tratamiento psicológico desde hace algún tiempo, situación considerada por los investigadores al momento de analizar el caso.
Este elemento ha motivado la intervención de personal especializado del Ministerio Público y de organismos de protección infantil, a fin de garantizar un proceso ajustado a derecho y con enfoque de protección integral.
El joven fue trasladado a la Subdirección Regional de Investigación de la Policía en La Altagracia, donde permanece bajo custodia.
El caso continúa bajo investigación activa, mientras las autoridades judiciales evalúan las medidas que correspondan al adolescente, conforme al Código para el Sistema de Protección y los Derechos Fundamentales de Niños, Niñas y Adolescentes (Ley 136-03).
Agentes y especialistas de la conducta humana de la Fiscalía local trabajan en la recopilación de evidencia material, testimonios y documentos que permitan establecer una cronología precisa de los hechos.
El Instituto Nacional de Ciencias Forenses realiza procedimientos técnicos para confirmar las causas exactas del suceso.
Fuentes cercanas a la investigación señalan que los oficiales han sostenido entrevistas con familiares y vecinos con el propósito de conocer los antecedentes de convivencia entre los hermanos y cualquier señal previa de conflicto o alteración emocional que pudiera aportar información relevante.
Las diligencias se desarrollan bajo estricta confidencialidad, preservando la identidad y los derechos de los involucrados, especialmente por tratarse de menores de edad.
En tanto, las autoridades competentes aseguraron que se mantendrán vigilantes para evitar situaciones similares, reforzando la coordinación entre los organismos de salud, educación y seguridad.
Este suceso ha reavivado la preocupación por la salud mental infantil y juvenil en el país, un tema que en los últimos años ha cobrado relevancia dentro de las políticas públicas.
Se prevé que en los próximos días el Ministerio Público ofrezca una actualización oficial sobre los avances de las pesquisas y las disposiciones adoptadas respecto al joven implicado.
La comunidad espera respuestas que permitan comprender este episodio y que, a partir de él, se refuercen los mecanismos de prevención, educación familiar y asistencia psicológica, con el propósito de proteger la integridad y el bienestar de los niños y adolescentes en el territorio nacional.
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