Por Marcelo Peralta
Santiago Oeste, R.D.- Vivir
en el Distrito Municipal Santiago Oeste están viviendo momentos "aciagos", por la ola de robos, violencia, delincuencia, atracos y asaltos, sin que
se apresen a los forajidos.
Entre hombres y mujeres
muestran preocupación debido a momentos de intranquilidad y las autoridades no
actúan.
Los afectados demandan de las
autoridades establecer vigilancia policial permanente.
Preocupados están moradores pese
a la cantidad de hechos delictivos, las autoridades no interceden, evidenciando
el gobierno abandonó a la sociedad.
Roberto Espinal, empresario
ferretero denunció hace poco, su negocio ubicado en la calle Sabana Iglesia fue
violentado y se llevaron más de seis millones de pesos en efectivo.
El sacerdote Javier Báez, de
la parroquia Santa Marta en San Lorenzo, mostró preocupación por el aumento de
los hechos delincuenciales.
Dice los forajidos actúan de
manera impune, porque en Santiago Oeste nadie los apresa y la población está
desamparada.
Taxistas se reúsan ir más
allá de Monte Rico y San Lorenzo pasadas las siete de la noche, porque la zona
es “tierra de nadie”.
Reclaman del presidente Luis
Abinader ordenar equipos, incremento de policías, que patrullen días y noches
las calles de todo Santiago Oeste a fin de reducir el auge de la delincuencia.
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