No se vislumbra solución a los temas
neurálgicos que más temores infunden en la sociedad dominicana y por los cuales
el pueblo favoreció al PRM y al presidente Luis Abinader.
La delincuencia, corrupción pública, privada, abusos en los precios de los alimentos,
las medicinas, violencia de género, desempleos, alzas del transporte, migración
haitiana, tráfico, venta y consumo de drogas.
En los corrillos citadinos, el sentir de los dominicanos, refleja
desánimos y desconciertos sociales, ya que no ven perspectivas a la solución de
estos males debido a la “flojera” mostrada por el actual gobierno de Luis
Abinader.
Hay quienes señalan que votaron
en contra del Partido de la Liberación porque se “cansaron” de la dejadez del presidente
Danilo Medina y lo sacaron del poder.
Además, que le dieron la
oportunidad al Partido Revolucionario Moderno y a Luis Abinader y se han dado
cuenta que todo es más de lo “mismo”.
Lamentan que de nada valió hasta
el momento la participación electoral del pueblo de echar del poder al PLD y a Danilo
Medina cuando el costo de la vida, inseguridad ciudadana, entrada de millares
de haitianos continúa siendo elevada.
Sostienen que los supermercados y colmados
barriales se han convertidos en sitios de terror para los consumidores debido a
los altos precios de los alimentos.
Y donde la tapa le pone al “pomo” son las
farmacias, cuyos dueños han quintuplicados los precios de los medicamentos
debido a la presencia del coronavirus.
Además, el auge de la delincuencia que se ha
incrementado a causa del “desgano” de la Policía por las deplorables
condiciones en las que deben trabajar.Otro elemento que se adhiere mes la complicidad judicial, en que la Policía
apresa a delincuentes y en horas retornan a las calles a incrementar sus
acciones delictivas.
También, tras la llegada de Luis Abinader y
el PRM al poder, millares de haitianos indocumentados han entrada por la “puerta
ancha de la frontera”.
Los indocumentados tienen más derechos y
poderes que los nativos debido al apoyo que reciben del gobierno y sectores de
poder que apostan a la fusión para una Confederación entre República Dominicana
y Haití que tendrían la sede en Santo Domingo.
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