Dajabón,
R.D.-El gobierno dominicano trata de buscar la tranquilidad en la zona
divisoria con Haití y ha enviado al ministro defensa, teniente
general Rubén Darío Paulino Sem a hacer un proceso de investigación respecto a
la destrucción de las pirámides en el sector agrícola El Coco
de Sánchez de aquí.
En estas condiciones han quedado las pirámides destruidas por haitianos en franca provocación de conflictos territoriales con República Dominicana.
Así han dejado los haitianos varias de las pirámides en la zona divisoria con República Dominicana para provocar reacciones entre ambas naciones.
Se
busca indagan la apropiación de porciones de 50 hectáreas de tierra de la que
supuestos haitianos se han apoderado de ella para provocar conflictos entre
ambas naciones.
En la comisión está el
Director de la Policía, Teniente General Ney Aldrín Bautista; Claudia Francesca
de los Santos, Directora del Instituto Nacional del Transporte; empresarios del transporte de la Región Noroeste
representados por Modesto Torres, de (CONATRA); la senadora Sonia
Mateo, la gobernadora Ramona Rodríguez; autoridades civiles y militares.
Haitianos y haitianas en su territorio.
TRATADOS.
Ha de recordarse
que el embajador dominicano William Páez Piantini trata de adelantarse,
quien ha pronosticado la posible ocurrencia de conflictos territoriales entre
la República Dominicana y Haití, con una investigación histórica sobre los
límites que separan a ambos países.
Con
ese propósito, el diplomático publicó el libro "Frontera
Dominico-Haitiana, estableciendo en su época de que 6 zonas, 97 planos con la
cantidad de 313 pirámides" fueron instaladas en la zona divisoria.
Establece
que las mismas recoge los afanes del pueblo dominicano para que se reconocieran
los límites de su territorio en función de lo establecido en el Tratado de
Aranjuez, firmado el 3 de junio de 1777 entre Francia y España.
Señala
que dichos límites, vigentes a la fecha, fueron objeto de disputa cuando en
1874 Haití y República Dominicana firmaron un tratado de Paz, Amistad,
Comercio, Navegación y Extradición.
Señalas
en su artículo 4 establecía el compromiso de las partes para delimitar sus
posesiones, en momentos en que algunos lugares del territorio dominicano
estaban bajo dominio haitiano.
Tras
los afanes anexionistas del dominicano Buenaventura Báez que ostentó entre 1868
al 1874, el general José María Cabral buscó la ayuda de Haití para enfrentarlo.
Haití,
entonces, asentó sus tropas y su bandera en varios poblados dominicanos como
forma de proteger a las tropas aliadas.
Pero,
en "el 21 de enero de 1929, en la
ciudad de Santo Domingo se lleva a cabo la firma del Tratado Fronterizo que no
obstante algunas dificultades que se presentaron durante su ejecución.
Se
dejó de manera definitiva establecidas las fronteras entre las repúblicas
Dominicana y la de Haití".
El
ingeniero Alfredo Buonpensier, oriundo de la isla Córcega, quien fuera
contratado por el gobierno dominicano en 1906 fue el encargado de levantar los
planos topográficos de la frontera.
Eso
dio como resultado de su trabajo sería determinante para la solución de
conflictos posteriores entre ambos países, hasta llegar al Tratado de 1929.
En el
mes de octubre y los tratados firmados en los años 1933 y 1935 por el dictador
Rafael Leónidas Trujillo Molina y el gobernante haitiano Stenio Vincent, decidieron
complementar los trabajos de delimitación fronteriza iniciados en 1929.
Sin
embargo, se determinó que los mismos fueron suspendidos por dificultades de
interpretación alegadas entonces y que culminaron con el trazado de la
Carretera Internacional y la entrega a Haití de unas 600 mil tareas, según Páez
Piantini.
No
obstante, los trabajos generales de delimitación de la frontera
dominico-haitiana que se iniciaron el 3 de junio de 1929 y que concluyeron el 1
del mes de julio de 1942 en los que se produjeron 97 planos repartidos en 6
zonas que fueron trabajadas, las 1,3 y 5 por los comisionados dominicanos, y
las 2,4 y 6 por los comisionados haitianos.
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