El joven Randor Agramonte hijo de una mujer nativa de San Francisco de Macorís, provincia Juan Pablo Duarte, República Dominicana fue muerto a tiros en Puerto Rico.
El
cuerpo fue hallado a la altura de la PR-89, kilómetro 10.7, frente a la
Urbanización Ciudad Jardín en Juncos, Puerto Rico y residía San Juan y familiares
reconocieron el cadáver en el Instituto de Ciencias Forenses.
Lo calificaban
de joven tranquilo, sociable, simpático, trabajador, hijo de la dominicana Ramona
Agramonte, nativa de San Francisco de Macorís donde estudió y vivió un
tiempo.
Era
guardia de seguridad en un estacionamiento de Hato Rey, hace poco incursionó a
chofer de la plataforma Uber.
Tiene
heridas de bala en distintas partes del cuerpo y antes de desaparecer habría ido
a visitar a una amiga.
Viajaba
en una Kia Seltos del 2024, ubicada en la urbanización Parcelas Falú y su madre
a la hora del crimen estaba en San Francisco de Macorís, velando a su hermana que
falleciera de cáncer.
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