Investigadores poseen innovadores redes de grietas, calor de replicar síntesis de componentes vitales de la vida en la Tierra en experimento de moléculas primitivas.
Desde década del 1950 científicos recrean
condiciones de la Tierra primitiva en un tubo de ensayo, cuyo iniciador
Stanley Miller introdujo en matraces interconectados ingredientes simples
que se creía que se arremolinaban en la atmósfera, océanos que aplicó calor y electrocutó
al simular un relámpago.
De esa liga surgieron aminoácidos, componentes químicos de la vida que inició dentro
de la química, biología y preguntas científicas enfrenta a la
humanidad.
Científicos de la Universidad Ludwig
Maximilian de Múnich dan pasos al demostrar moléculas más complejas, importantes
en la vida, ingredientes básicos de la Tierra primitiva.
Hicieron fluir agua de las grietas, con
componentes químicos clave, aplicaron calor, imitando un proceso similar al que
podría ocurrir cerca de respiraderos hidrotermales en rocas porosas cerca de
una piscina geotérmica.
Descubrieron el calor que fluye vía las redes
geológicas, filtran moléculas, ayudam a crear cadenas biopolímeros
esenciales para la vida, afirmó Matthew Pasek, profesor de Geociencias de
la Universidad del Sur de Florida.
Químicos, biólogos, astrofísicos y geólogos,
encabezados por Christof Mast, biofísico de la Universidad Ludwig
Maximilian de Múnich, dice que ese hallazgo tuvo lugar la “química prebiótica”
que dio origen a la vida.
Esos científicos se han enfrentado al problema de que
la Tierra primitiva no era un laboratorio prístino, con vasos de
precipitados, pasos de purificación impecablemente cronometrados y reservas
concentradas de ingredientes.
Una cosa es recrear la química de la vida en un
laboratorio, que experimentos que se pueden hacer en un matraz ser improbables,
en el mejor de casos en las desordenadas condiciones del mundo real.
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