El presidente de la Conferencia Episcopal de Haití, Max Leroy
Mésidor, emitió un comunicado alertando al mundo de una posible guerra civil en
la tierra de Toussaint Louverture, líder de la Revolución Haitiana
contra franceses 1804.
Para el religioso de no buscarse medidas urgentes en la comunidad
internacional, Haití está camino “peligrosamente hacia la
guerra civil”.
La máxima autoridad religiosa dice las bandas armadas controlan, calles,
avenidas, lo que entra, sale, hacen, debe hacerse y la seguridad empeora.
Tras el comunicado el purpurado expone “las fuerzas de policía
haitianas están impotentes al no temer resistencia adecuadas para enfrentar bandas,
porque tienen armas sofisticadas, que se han convertido en un ejército
organizado.
El arzobispo de Puerto Príncipe asegura la Iglesia católica se ha
convertido en objetivos de las bandas y secuestrados.
"Hay secuestros por doquier contra
ricos, pobres, intelectuales, analfabetos, puede en las garras de las bandas.
Es una dictadura, una lacra que hay que combatir”.
Según el religioso la vida en Haití se ha vuelto peligrosa para obispos,
sacerdotes haitianos que están en zonas controladas por las pandillas en Puerto
Príncipe.
“Intentamos trabajar, dar testimonio juntos. No es fácil, pero debemos
llevar la cruz y seguir a Cristo, más ahora en tiempo de Cuaresma”, afirma el obispo
Max Leroy Mésidor.
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