Kayla
tenía 9 años, secuestrada por su madre en 2017 en el suburbio de Chicago South
Elgin, Illinois, tras su padre ganar la custodia completa de la niña.
Informó
la prensa local, la mujer se la llevó a un viaje de campamento, no regresó a su
hogar, la Policía de Asheville confirmó Kayla que ahora tiene 15 años pudo
reencontrarse con su padre y que su madre fue detenida.
Se perdió
la privacidad mientras nos conocemos de nuevo y navegamos por este nuevo
comienzo”, declaró el hombre en Illinois a través de un comunicado del Centro
Nacional para Menores Desaparecidos y Explotados de EEUU.
“También quiero dar las gracias a todos los
seguidores de la página de Facebook ‘Bring Kayla Home’, que ayudaron a mantener
viva su historia y fueron fundamentales en la difusión de la búsqueda”, dijo.
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