Comisión del Senado supervisa zona afecta por los fuegos forestales y las talas indiscriminada de árboles en Santiago Rodríguez.
Por Onelio Domínguez y Marcelo Peralta
SABANETA,
Santiago Rodríguez, R.D,- La comisión ambiental del Senado de la República se
trasladó a “Laguna de Cenoví” en el parque Nacional Armando Bermúdez a observar
la depredación y quemas de bosques registrados en la Cordillera Central desde San
José de las Matas, Santiago Rodríguez y Restauración en Dajabón.
La encabezó Antonio
Marte senador por Santiago Rodríguez; de la presidente José Desiderio Valverde
estuvo Eddy Nolasco y por la de Monte Plata, Lenin Valdez, quienes
se desplazaron a la zona devastada en Cidra de Toma realizando operativos aéreos
y terrestres.
Tiene
el objetivo de hacer un levantamiento técnico sobre las grandes
depredaciones, daños causados por los incendios reportados en meses de marzo y principio
de abril.
El
vicepresidente de la comisión de la Cámara Alta, Antonio Marte, indicó dueños
de fincas de maderas están comprometidos con iniciar una jornada de
siembra de árboles en la zona afectada.
Marte
llamó al presidente Luis Abinader pagar a campesinos en la zona
afectada para reforestar en la provincia de Santiago Rodríguez en tiempos de
lluvias, porque ahí es que nacen los ríos que llevan agua a la Región Noroeste
y a Haití.
La
comisión observó hay tala indiscriminada, quema de árboles para la ejecución de
ganadería en área protegida, donde se generan recursos hídricos que
alimentan los ríos Mao, presa de Monción, Masacre, Artibonito, entre otros.
Mientras
representantes del Poder Legislativo estaban en el lugar, realizando el
levantamiento de los daños en Cidra de Toma, cerca de Laguna de Cenoví,
comunitarios externaron quejas resaltando que no tienen otro sustento, más que
la ganadería.
El
ambientalista Félix Manuel Rodríguez, acompañó la comisión, indicando hace
falta la intervención del Estado para poder ayudar a campesinos hagan
actividades agrícolas en áreas protegidas.
Cita
desde hace más de cuatro años que no estaba siendo vigilada, ya que el único
guarda de parque que había en la zona tiene tres años que murió.
Rodríguez,
es técnico agrícola y sostuvo el impacto que se ha producido por desmontes
indiscriminados de árboles y el incendios forestales van a tomar entre 15
a 20 años poder recuperar nuevamente parte de la zona boscosa.
“Entre
20 a 30 años, probablemente tarde recuperar la función que hacían esos bosques
para retener el agua, claro está, sin la intervención humana”, dijo el
ambientalista.
Explicó
que lo que va a pasar es que se va a producir una acumulación de las hojas
caídas, de las ramas, por lo que eso producirá un efecto esponjas, que es lo
que absorbe las aguas cuando cae, lo que permitirá que los arroyos, ríos y
cañadas puedan fluir.
“Todo
esto se puede dar, en caso de zonas devastadas se deje sin la intervención
humana, sin intervención de ganadería para que la misma naturaleza pueda irse
reponiendo”, sostuvo Félix Manuel Rodríguez.
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