Por Marcelo Peralta.
Santiago, R.D.- El Estado, familia y sociedad deben encausar
alternativas capaz de incorporar a los jóvenes en labores productivas y evitar andan
en las calles descarriados y cometiendo hechos reñidos con las leyes vigentes.
Ese es el pensar del editorialista del semanario Camino órgano del Arzobispado
de Santiago al considera el estado debe buscar salidas a la situación que
atraviesan miles de jóvenes dominicanos.
Analiza quienes parece perdieron el amor a la vida caminan sin ideales,
cayeron en vicios que ponen en sus sendas adultos están llevando a un callejón
sin salida.
Cita miles de jóvenes con apenas 20 años parecen ancianos con huellas en
sus rostros evidenciando la soledad existencial que los marca, a pesar del
frescor que acompaña de sueños que albergan de tener nuevos horizontes.
Espera en los 12 meses del año 2023 se pueda encender una “luz de
esperanza, que maldecir la oscuridad” indica el editorialista, al afirmar es
necesario encender luces de optimismo y esperanza para enfrentar retos y
desafíos presentes.
Explica todavía existen aires del año nuevo que acarician estos días y
que solo hace falta hallar el mensaje que trajo el Salvador de la humanidad,
Jesús de Nazaret cuando expuso “razones para vivir” y darse a los demás en
busca de un mundo mejor.
Hace saber en la Jornada Mundial de la Juventud, en agosto del 2011, el
Papa Benedito XVI que recién murió de regreso a la Casa del Padre, les decía a
los jóvenes “La fe no se opone a sus ideales más altos sino exalta y
perfecciona.
El Santo Padre añadía a los jóvenes no se conformarse con menos que la
Verdad y el Amor y conformen con menos que Cristo”.
Estado, familia y sociedad en general, recordemos que ayudar al
desarrollo integral de nuestros jóvenes debe ser una meta prioritaria para este
2023.
Sólo así tendremos un presente y futuro de prosperidad para nuestro
país.
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