Dajabón,
R.D.- Legaciones del “Movimientos Patriótico No Tenemos Miedo” y “G-10” se
movilizaron desde Santo Domingo, Santiago, La Vega, San Francisco, para
defender la historia de la frontera dominicana.
Entienden
que desviar las aguas del Río Masacre por órdenes del presidente haitiano
Jovene Moises es una “provocación” de
ordenar desviar las aguas del Río Masacre que nace en República Dominicana que
mediante acuerdo internacionales no se pueden usar para fines personales.
Ha Dajabón
llegaron legaciones a percatarse del canal de riego que construye Haití en la
localidad Ferié, entre Juana Méndez y Fort Liberté provocando y violando
tratados internacionales.
El
presidente de Haití, lo que busca llamar la atención, bajar la tensión del desorden
de su gestión, cambiar el rumbo a la crisis política, social, económica, la violencia,
apaciguar los ánimos.
Además,
mientras eso ocurre, millares de haitianos de todas las edades y condiciones físicas
huyen despavoridos siendo acogidos por los dominicanos usando la “humanidad”.
Encabezan
la comisión de patriotas Francis Herrera y Manny Solano, que al llegar aquí,
afirman que Haití, con la construcción de esa obra, provoca y viola los
acuerdos internacionales que datan desde decenas de años.
Llegaron
a la pirámide 13, área en que el gobierno de Haití, Jovene Moises utiliza obreros
y equipos pesados para construir el desvío del Río Masacre.
Afirman
que el Río Masacre nace en la Cordillera Central en República Dominicana y que
en su trayecto lleva agua a Haití que desde el reparto de la Isla por acuerdo
entre las repúblicas de Española y Francia se firmaron tratados de paz
destinados a dirimir diferencias territoriales.
Recuerdan
que el Prime Tratado de Nimega fue en 1678, legitimado 19 años después por el
Rijswijk en 1697 y revisado en el 1929 y señalan que Haití no ha respetado “nada”.
Las
metrópolis europeas firmaron convenciones con la intención de delimitar las posesiones
de República Dominicana y Haití ha violado todo lo acordado, en especial el de
Aranjuez de 1777 y el Tratado de Basilea de 1795.
En de
Aranjuez fue respecto a los límites en la parte occidental francesa y la
oriental española de la Isla, que a pesar de todo, Haití violó y ocupó por 22
años desde el 1822 al 1844 el archipiélago sembrando la violencia, crímenes,
atropellos y atraso.
Tras
la Independencia de la República Dominicana con la derrota a Haití en 1844,
múltiples reuniones infructuosas, ocupaciones, violaciones, batallas, guerras, de nuevo se firmó el Tratado Fronterizo del 21
de enero de 1929 los presidentes Horacio Vásquez y Louis Borno, ratificado en
1936 por Rafael Trujillo y Sténio Vincent.
Para
lograr esos acuerdos, República Dominicana cedió a Haití 6 mil 200 kilómetros del
territorio que le pertenecía a España por el Tratado de Aranjuez.
A
pesar de la solidaridad de la República Dominicana los haitianos se mantienen “neciando”
y provocando.
Ahora,
el presidente de Haití, Jovene Moises ha
ordenado que se construya un canal para desviar las aguas del Río Masacre para
favorecer a hacendados lacerando las relaciones bilaterales entre ambas naciones.
A
pesar del conflicto, el ministro de Defensa, Carlos Luciano Díaz Morfa, en una
actitud tilda de poca “responsable” en una visita a entrega dos viviendas a
soldados, quien al ser consultados por periodistas dijo de manera :Escueta,
bueno “la frontera está “muy bien”.
Luego
añadió; “Gracias a Dios en la frontera entre Haití y República Dominicana no
tenemos problemas”.
Sin
embargo, hay ciudadanos que consideran si el presidente Luis Abinader no
reacciona, adoptar medidas urgentes, la situación podría desencadenar acciones
que podría lamentarse en el porvenir.
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