Juan Martínez, ayudó a su esposa, hijo y a los demás siendo el último de los que quedaron en suspenso en el aire.
Por Marcelo Peralta
Puerto Plata, R,D.-Juan
Martínez se convirtió en el “héroe”, “protagonista
de la tragedia sin sangre” y narrador de la dramática escena vivida ayer domingo
por 32 personas y sus operadores, cuando el teleférico de Puerto Plata se “paró”
en el aire a mitad de trayecto.
Martínez registra una de las
descripciones más valientes y lo convierte en héroe trágico, cuando en la cabina
con 16 personas, su esposa y con un hijo de un año de edad quedaron en suspenso
en el aire.
Fue la inyección que mantuvo
con vida a que iban en esa cabina dando ánimo, aliento y esperanza de que
sobreviviría.
Cuando se acercaron los
rescatistas, cedió el paso a menores y mujeres.
Su esposa e hijo salieron
junto a otras personas.
Como solidario, ayudó a los
rescatistas y cedió el turno a los restantes 15 pasajeros varados.
Mientras su esposa e hijo
estaban en tierra, Martínez se quejó ayudando y fue el último en abandonar la
cabina del funicular averiado.
Hizo el papel de un ciudadano
solidario y se convirtió el héroe trágico al desempeñar esa labor de ser un
hombre cooperante.
Por esas proezas es un héroe trágico, aunque “anónimo”.
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