El
Pendiente les arrancaba los aretes de las orejas y las cadenas del cuello a las
mujeres de mucha edad, porque era más fácil escaparse.
Sin embargo, la Policía le tendió una trampa cayendo en la misma.
Seleccionaba a sus víctimas cuando
entraban a hacer compras en los supermercados y ha sido detenido por agentes de
la Policía Nacional en Móstoles.
La
investigación comenzó en abril pasado, cuando los agentes recibieron varias denuncias
de robos con violencia cometidos por un individuo de
similares características, comprobando que los hechos podían ser realizados por
una misma persona, ya que seguía siempre un mismo 'modus operandi'.
El
detenido seleccionaba a las víctimas, todas ellas mujeres de avanzada edad, que
tras la compra en un supermercado se dirigían a su domicilio, y cuando
se encontraban solas o en el portal las asaltaba de forma violenta.
El
atacante lo hacía por la espalda y de sorpresa, robando las joyas
de oro que portaban -pendientes, anillos y colgantes-.
A
pesar de los pocos datos con los que contaban los agentes, ya que las víctimas apenas
tenían contacto visual con el agresor, lograron su
identificación y detención, acusado de haber cometido los robos.
El
detenido fue puesto a disposición de la autoridad judicial como presunto
responsable de 18 robos con violencia e intimidación, delitos por los que el juez
decretó su inmediato ingreso en prisión.
La
Policía reclutó a una vieja a la que colocó anillos y cadenas de lujo en los
dedos y el cuello de la dama y acordonó toda el área donde “El Pendiente” a
saltar.
Fue
ahí que en el primer intento quedó atrapado y ahora purgará en la cárcel una
condena que oscila entre los 30 y 50 años sin derecho a fianza.
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