La señora Benigna Roa Terrero nació el 13 de febrero del año 1911, en San Juan de la Maguana, de donde emigró a la comunidad de Boca Chica en 1926, a acompañar al músico Julián Morillo en ocasión de la fiesta de apertura del llamado “Casino de Boca Chica”, que fue inaugurado por el presidente de la época Horacio Vásquez y doña Trina de Moya.
La centenaria dama contaba con frecuencia que habría llegado a Boca Chica a pies procedente de San Juan de la Maguana, y que esta travesía le había tomado 16 días.
Ya en Boca Chica, aprendió el oficio de partera o comadrona por la necesidad que existía en estas comunidades en donde ni siquiera la energía eléctrica había llegado, y en su sano juicio le conto a este reportero hace unos años, que se hizo partera con una chiva que no podía parir y se decidió a ayudarla.
De esa forma Benigna pensó que así serian con las mujeres muchas que habían perdido la vida por no llegar a tiempo a un hospital en la capital o San Pedro de Macorís, oficio al que le dedico más de 50 años hasta que en 1986 el gobierno de Jorge Blanco entregara a la comunidad un hospital Materno Infantil.
Entre los años de 1930 hasta principio de los 80, tres comadronas y un partero eran las principales figuras que asistían a las mujeres de Boca Chica, sus bateyes y los habitantes de las zonas cañeras en labores de partos, Ramón Eusebio Mejía (Ramón Grande), Jovita Soriano, Justina Beato Y Benigna Roa se convirtieron en leyendas como curanderas hasta 1986.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario