Sociedad de Pediatras exige a la Policía más esfuerzos en la búsqueda del médico Enrique Antonio Espinal Castillo desaparecido desde Villa Olga a Hato del Yaque la noche del martes.
Por: Marcelo Peralta
Santiago, R.D.-La desaparición misteriosa del médico especialista en perinatología, Enrique Antonio Espinal Castillo, de 48
años, ausente de familiares desde la noche del martes genera preocupación,
demandando de las autoridades investigar y determinar su paradero.
Familiares ofrecen
el número telefónico 829-345-0728 para cualquier información de su
paradero.
El profesional de la Medicina está adscrito al Hospital
Regional Materno Infantil, doctor José Francisco Peña Gómez en Mao, provincia presidente
José Desiderio Valverde antiguo Instituto Dominicano de Seguros
Sociales-IDSS-.
Es de tez clara, estatura 5´10, color de pelo negros,
usa lentes recetados, la última vez observado por familiares vestía pantalón
corto y una camiseta.
Apoderaron autoridades policiales de su desaparición, quienes
se quejan no tienden informaciones ya que las averiguaciones están lentas.
Parientes dicen el galeno no es persona conflictiva, querido
en el sector de Villa Olga donde reside, solidario en las funciones labores,
profesionales y la sociedad.
Abanderado del cuidado y protección de niños, revelan
familiares de Espinal Castillo.
Frecuenta un gimnasio ubicado en la avenida República
de Argentina.
Reacción y pedido.
La cúpula de la Sociedad Dominicana de
Neonatología-Sodone- a la que pertenece Espinal Castillo, mostró consternación
por este caso e instó a las autoridades intensificar las investigaciones y dar respuesta
de la desaparición del doctor Enrique Antonio Espinal Castillo.
El presidente de Sodone, doctor Santiago
Martínez, llamó al director de la Policía a nivel del país, mayor general Ramón Antonio Guzmán
Peralta disponer de sus mejores investigadores para buscar al profesional de la
salud y la paz retorne a familiares, médicos y la sociedad.
Para Martínez la situación preocupante en un país pequeño
se extravíe una persona y nunca aparezca, a pesar de la tecnología prevaleciente.
Se une a la preocupación por la desaparición de
familiares, poniendo sus medios a disposición a buscar al profesional de la
medicina.
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