Santiago, R.D.-Una legación de la ópera china se presentará gratis el sábado 19 a partir de las siete de la noche en el Centro de la Cultura en Santiago.
Las gestiones para esta actividad ha sido gestionada por el diputado oficialista el abogado y gestor cultural Víctor Valdemar Suárez Díaz.
El Centro de la Cultura de Santiago con capacidad para 500 personas está ubicado en la esquina que forman las calles Del Sol y Presidente Silvestre Antonio Guzmán cerca del Parque Juan Pablo Duarte y la Catedral Santiago Apóstol.
Desde que se hizo el anuncio, ya muchas personas están interesadas en acudir a este magno evento socio cultural.
Tras el gobierno dominicano establecer relaciones diplomáticas con China ha comenzado a abrirse las puertas a una serie de eventos socio culturales, políticos, comerciales y de otras índoles.
La ópera china es el nombre que recibe el teatro tradicional en China.
Es dirigida por Wang Yida, quien definió el teatro chino como "arte que sintetiza actuación, acrobacia, artes marciales, bellas artes, música y poesía".
La misma se remonta a la dinastía Tang con el Emperador Xuanzong que surgió en el año 712 hasta el 755 y quien fundador del "Jardín de los Perales".
Se convirtió en la primera compañía documentada en China, y de manera exclusiva estuvo al servicio de los emperadores.
Se especifica que fue durante la dinastía Yuan que surgió en el año 1279 y perduró hasta el 1368.
A través de la misma se introdujeron en la ópera las variedades como el Zaju, con actuaciones basadas en esquemas de rima y personajes.
En el siglo XXI, las profesiones de la ópera son todavía llamadas Disciplinas del Jardín de los Perales.
De acuerdo a informes, en China existen más de 300 variedades de ópera y teatro chino y la más conocida es la Ópera de Pekín.
Esta tomó su forma actual a mediados del siglo XIX, habiendo sido muy popular a lo largo de toda la dinastía Qing entre los años 1644 hasta el 1911.
Otras manifestaciones dramáticas importantes en China son el Kunqu y diversas variantes de teatro de sombras, entre las que destacan por su antigüedad y delicadeza las sombras pequinesas o del norte, y las cantonesas, o del sur".
El teatro de China está documentado a partir del siglo VI, con sus códigos y parámetros que se fijaron en la segunda mitad del siglo XIX sintetizándose en la "Ópera de Pekín", y se ponían en escena en los géneros melodramático; mimo e histrionismo gestual; temática de carácter histórico o legendario.
Asimismo personajes de preponderancia del canto; confluencia de la acrobacia y la danza; gran presencia del vestuario y la escenografía y simbolismo de los colores.
Sus características eran los instrumentos de cuerda tradicionales del país, los de percusión que envuelven la trama con un acompañamiento rítmico casi constante.
Y sus diálogos suelen ser textos recitados, en los personajes serios de la trama, o coloquiales, cuando actúan mujeres y payasos.
Los maquillajes, muy elaborados, constituyen auténticas máscaras que permiten identificar el personaje que se está representando.
En el caso concreto de la "Ópera de Pekín" su repertorio tradicional incluye más de mil piezas.
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