Arzobispo de Santiago pide a minera Barrick respetar políticas medio ambientales en República Dominican a.

Por: Marcelo Peralta

Santiago, R.D.- El arzobispo de la Arquidiócesis de Santiago,. su eminencia reverendísima, monseñor Héctor Rafael Rodríguez, tiene preocupación por conflictos sociales generados contra campesinos por la empresa minera de capital canadiense, Barrick Gold, en Pueblo Viejo, provincia Juan Sánchez Ramírez en el Cibao Oriental.

Moradores hacen paro repudio a daños de contaminación del agua, apropiación de terrenos, daños a árboles, pérdida de la biodiversidad, problemas de salud, desplazamiento forzado de comunidades y son heridos a tiros por policías y militares enviados por el gobierno de Luis Abinader.

Ante este cuadro represivo el máximo representante en Santiago de la religión Católica en la eucaristía “Día de la Altagracia”, advirtió que si esas acciones no favorecen a la sociedad habrá consecuencias catastróficas, generará conflictos sociales, porque la Madre Naturaleza no perdona.

El purpurado deplora que la minera Barrick Gold intente instalar un proyecto de depósito de agua contaminante   sin tener la aprobación de campesinos dueños de las tierras.

Dice el proyecto de ejecutarse por la Barrick Gold causará daños ambientales, efectos negativos de un santuario natural en la provincia Juan Sánchez Ramírez y entornos.

En la homilía a la “Virgen de La Altagracia”, exigió tomar acciones y crear políticas medioambientales a las autoridades.

Monseñor Rodríguez pidió a la madre protectora de República Dominicana interceda evitando enfrentamientos entre agricultores dueños de terrenos, policías y militares represivos que responden a intereses de la empresa canadiense.

Abogó por la construcción de una sociedad más justa, solidaria, aplicación de políticas acertadas, resolver graves males y evitar daños al medio ambiente.

Devotos en Santiago testifican milagros ante promesas formuladas a la Virgen de la Altagracia.

El religioso demandó a obreros, empleos exigir salarios dignos, justos, implorando a la madre protectora interceda por la reconciliación y unidad del pueblo dominicano.

En los actos religiosos acudieron miles de feligreses a venerar la virgen, también contó con autoridades civiles y militares.