La escasez de semiconductores durará hasta inicio del año 2023.
Lo dice un informe de Deloitte en que las empresas estarán esperar entre 10 y 20 semanas para adquirir los tipos de chips.
Deloitte dice que este 2021
representa un incremento tres veces superior al destinado anual en
semiconductores entre 2000 y 2016.
El impacto de la escasez de
chips será desigual en la industria, sectores afectados y otros que se
escaparán de la crisis.
El trabajo de Deloitte es que
demanden carga de proceso muy avanzadas, que utilizan ordenadores, móviles y
tabletas.
Además de los servidores de
los centros de datos que hacen posible el desarrollo digital de las empresas.
También salpicó a la industria de la automoción, cada vez más dependiente de la alta tecnología.
Todos estos negocios seguirán con la luz roja del depósito encendida, dada la
dificultad de fabricación.
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