Por Marcelo Peralta
Santiago Rodríguez, R.D. A 20
años del cruel y confuso incidente en que cuatro hombres hirieron al senador del
PRD de aquí, abogado Darío Gómez Martínez, sus familiares tienen esperanza de
que el crimen se aclare.
La noche que lo hirieron
estaba en la casa de su amigo Martín Durán en Santo Domingo Este, en cuyo hecho,
resultó herido de gravedad su chofer Alexis, aunque sobrevivió.
Contrario al legislador
herido el 11de diciembre del año 2001 y murió tres días después.
Del hecho se vinculó a Carlos
Gerónimo Alfonseca-Carlos Collares-; Ernesto Antonio Meléndez-El Chino-; Pedro
Urbano Piña-Kelvin-; Ramón Antonio Rosario-El Gringo-; y Domingo Daniel Minaya-El
Mago-.
Para evitar confesaran las
causas reales del crimen, varios de estos presos fueron asesinados en la
cárcel, porque se ha dicho que al legislador lo mandaron a asesinar gentes
ligadas al narcotráfico.
Este fue un crimen
planificado, dice Celeste Gómez Martínez
hermana del senador malogrado y pese a depositarse pruebas y evidencias, el
sistema judicial nunca ha aclarado el caso.
Señala que en la Policía
Nacional había un arma de fuego como pruebas y desapareció cuando se descubrió
el auténtico dueño.
Y días antes de morir, Darío Gómez confesó a un amigo que cambió de vehículo, porque lo estaban persiguiendo y la familia se enteró de esto después del crimen, dijo.
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