General Santiago Rodríguez.
Allí nació la República Dominicana y ninguno de sus 53 presidentes ha dado el
sitial que merece.
Por
Marcelo Peralta.
Santiago Rodríguez, R.D.- A la provincia Santiago Rodríguez pareciera que con los 53
presidentes que ha tenido la República Dominicana le han caído las diez plagas
de Egipto.
Enclavada
en la Región Noroeste, fue donde se organizó y concretizó la gesta
restauradora de la República Dominicana, cuando en el año 1844 se logró
sacar de cuajo a los invasores haitianos que la ocuparon durante 22 años de
atrasos y penurias.
Sus
fértiles tierras generaron una de las figuras más emblemáticas como es el
General Santiago Rodríguez, héroe de la gesta patriótica del año 1844.
El
General Santiago Rodríguez fue el Primer Alcalde Municipal, Regidor y
presidente de esa institución, que aunque por el desorden institucional que ha
prevalecido en las administraciones en esa corporación edilicia, ni en los
pasados años ni ahora existe un archivo en donde se pueda obtener reales
informaciones sobre hechos y consecuencias históricas acontecidas aquí.
A
pesar de su trascendental rol desempeñado en la historia de esta provincia,
ninguno de los 53 presidentes que ha tenido la República Dominicana iniciado
por Pedro Santana designado por la Junta Central Gubernativa en el mes de
noviembre del año 1844 y menos el actual, Danilo Medina, postulado por el
Partido de la Liberación Dominicana -PLD- y electo por el pueblo en el año
2012.
Ninguno
de los 53 presidentes ha dado el carácter que merece, y cuyo nombre honra la
memoria del insigne general Santiago Rodríguez construyendo obras que generen
fuentes de ingresos para jóvenes y adultos.
Desgraciada
y lamentablemente, los infaustos políticos, solo hacen alaraco en tiempos
electorales, al estilo de Themo Lobos, engañando a las personas con
funditas de comida con arroz llenos de gorgojos, picapica, spaguettis y vinos
con sabor a trazas.
Su
fundador, general Santiago Rodríguez y sus actuales habitantes, han sido
relegados, humillados, olvidados y pisoteados por todos los gobiernos que la
tenido en su historia, a pesar de que es dueña de una cantera de profesionales
agropecuarios, maestros, abogados, médicos, de haber producido la primera y más
joven cirujana.
En
la historia reciente, quienes dirigen la Alcaldía Municipal fueron tan osados
que el monumento que honraba la memoria del general Santiago Rodríguez en donde
se dice que murió enfermo en el paraje El Cantón lo destruyeron para que ni
siquiera los recuerden quienes viven por allí y los que van a bañarse a las
aguas del Río Guayubín.
Y
como el General Santiago Rodríguez no tiene dolientes, los autores de este
crimen histórico se pasean como la antología poética de Juanito el Caminador,
sin que nadie le pase factura.
Las
desigualdades a que ha sido sometida esta provincia es de tal magnitud, que es
dueña de los ríos más caudalosos que existen en la Región Noroeste; tener el
cuerpo de agua más grande de América Latina; generadora de energía, sin
embargo, sus más de 100 mil habitantes ni tienen agua para beber, tampoco
empleos, la energía es deficiente; la juventud se pierde en los laberintos de
los accidentes de tránsito; consumo, venta y tráfico de drogas.
Ha
tenido autoridades que el único afán desmedido es hacerse ricos, saquear los
bosques, aprovecharse de las aguas de los ríos y corromper a la ciudadanía.
Aquí,
nace el Río Mao en la estribación la Cordillera Central que es la zona
productora de agua número siete de la República Dominicana a unos 940 metros
sobre el nivel del Mar, recorriendo la distancia de 97.17 kilómetros hasta su
desembocadura en la confluencia con el cauce del Yaque del Norte la Provincia
Montecristi.
Su
cauce es uno de los más aprovechados del país, porque desde él se sacan las
presas hidroeléctricas de Monción y el contraembalse de Mao; la toma del
acueducto múltiple de las provincias presidente José Desiderio Valverde,
Montecristi y Dajabón.
Desde
la presa de Monción, que pertenece a la provincia Santiago Rodríguez, salen
tres diques derivadores, uno privado para el regadío de una finca, el del Canal
Luis Liberto Bogaert y el Canal Mayor que irrigar miles de tareas en Valverde,
Montecristi y Dajabón.
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